Se trata de una obra de Bioarte realizada íntegramente por alumnos de UADE. Una iniciativa donde se unió la ciencia, el arte y la tecnología produciendo el primer filme protagonizado por bacterias. Con la colaboración de Natalia Oreiro, Carlos Kaspar y David Masajnik en las narraciones.

El proyecto nació de la unión de Biotecnología y Diseño Audiovisual (imagen y sonido) de la Universidad Argentina de la Empresa. La idea nace con la premisa de saber si ciertos microorganismos como las bacterias y hongos podrían interactuar e intervenir diseños artísticos y el resultado fue una película que sorprende.

El realizador y guionista Ramiro San Honorio, es también el director de la pieza y responsable de la Lic. De Diseño Audiovisual y quien junto a Leonardo Rodríguez Parise, Director de UADE Art, iniciaron el proyecto con los alumnos de Biotecnología, Audiovisual, Industrial y Gráfico, para darle cámara a las bacterias.

 

 

La consigna fue clave: las bacterias debían actuar una versión libre de “La guerra de los mundos” de HG Wells. Pero en el campo científico necesitaron de la ayuda Federico Prada, Director a cargo de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Exactas y Martín Vadillo, docente investigador, quienes coordinaron con los alumnos de la carrera de biotecnología y el resultado: un filme donde las bacterias “interpretan” y “replican” dibujos que representan una invasión extraterrestre en la ciudad.

Para el arte y diseño de los dibujos originales que las bacterias tenían que “diseñar” estuvo bajo el lápiz del artista Nelson Luty (Metelgol, Colony) y ese fue solo el punto de partida. Natalia Oreiro, Carlos Kaspar y David Masajnik, quienes se sumaron al proyecto académico “Divergente”, son los artistas encargados de dar sus voces a la narrativa de la gran invasión.

Mientras las colonias de bacterias van dando forma y dibujando cada escena de la historia, Oreiro, Kaspar y Masajnik nos otorgan una calidad interpretativa digna de los clásicos radioteatros y también de los actuales podcasts. Imágenes que parten del microscopio y se agigantan en el proyector de la pantalla grande.

 

Una propuesta única, original e inédita que une distintas disciplinas para contarnos una historia, con la voz de la multifacética Oreiro y protagonizada nada más ni nada menos que por bacterias.