- Llega el verano y las altas temperaturas se vuelven un desafío para no consumir más energía para climatización
Ante el nuevo escenario de tarifas energéticas y con la llegada del verano y las altas olas de calor que se esperan, climatizar una vivienda se va a convertir en un gran desafío para los argentinos. Uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta es cómo lograr la temperatura ideal, para lograr el confort térmico y no generar una demanda extrema de energía para climatizar. El confort ideal en una vivienda depende de muchos factores y, entre ellos, la temperatura. Se estima que la temperatura ideal para climatizar una vivienda en verano es de 24° C grados cuando se está en un ambiente cerrado y no se está realizando ninguna actividad física. Por debajo de estos 24° grados se puede decir que se consume una energía extra a lo estándar. Se calcula que cada grado que se baja de esos 24° C puede suponer entre un 5% y un 7% de incremento en el consumo del aire acondicionado. En cambio, si se sube de 24° C grados aumentará la sensación de calor y malestar. Por lo tanto, a la hora de poner el aire acondicionado en verano lo mejor es mantenerlo en 24° C; pero más abajo de esa temperatura las facturas serán más caras.
Por otro lado, para alcanzar la temperatura ideal en el hogar, es importante también que la humedad relativa del aire esté por encima de 40% y que no supere el 60%. Además de incidir negativamente en el confort térmico en el hogar, una alta proporción de la humedad también favorece el desarrollo de patologías respiratorias, la condensación en paredes y ventanas y la formación de moho. Un ejemplo cercano de cómo se hace un correcto uso de la energía y los aires acondicionados es Uruguay, que recomienda en verano tener 25° C para climatizar una vivienda. Uruguay es uno de los países en todo Latinoamérica que supo ahorrar dinero con el uso consciente de la energía.
Pero además de contar con un sistema de climatización eficiente y usarlo de forma correcta, también es fundamental revisar la construcción y sobre todo cómo son las condiciones de la envolvente – techo, muros y pisos de la vivienda. “La envolvente de los edificios es la principal interfase en nuestra relación con el ambiente exterior. Esa tercera piel que es la envolvente debe garantizar nuestro confort, así como lo hace la segunda piel que es la ropa. Para lograr mínimos niveles de confort en los ambientes interiores, se requieren diversas estrategias pasivas –aquellas que no requieren energía- y activas -que sí lo requieren. Dentro de las estrategias pasivas, la aislación térmica eficiente cumple un rol clave. Los hogares consumen alrededor de la mitad de la energía en climatizar sus espacios interiores. Es en ese punto donde aplicando aislación térmica eficiente podemos generar los mayores ahorros”, Arquitecto Federico García Zúñiga, consultor técnico de Andima, Asociación Nacional de Industrias de Materiales Aislantes.
Aires acondicionados vs. Aislación térmica eficiente
Son varias las diferencias y beneficios que hay entre usar aire acondicionado o instalar aislación térmica eficiente en una vivienda con el objetivo de climatizar.
La instalación de aires acondicionados es una solución a corto plazo. Aunque se priorice que sean eficientes y con tecnología inverter (es una tecnología que permite regular la velocidad del compresor de los equipos de aire acondicionado para que operen a una velocidad constante. En consecuencia, ofrecen un mayor rendimiento reduciendo en un 40 % el consumo energético respecto a los equipos convencionales) es un electrodoméstico que se debe reemplazar cada 10 o 15 años, lo que significa que en 50 años se necesiten 4 o más aires acondicionados.
Sinembargo la aislación térmica eficiente es una solución con beneficios permanentes, ya que sirve para toda la vida útil de la vivienda o edificio. Si se instala aislación térmica eficiente y aun así se quiere instalar aires acondicionados, lo bueno es que pueden ser aires más chicos o se pueden instalar menos cantidad.
¿Cómo alcanzar la temperatura ideal en una casa?
Como bien se dijo la envolvente es el equivalente a la “protección” de la vivienda y su principal función es mantener condiciones óptimas de confort en el interior.
Si se tienen en cuenta los 3 componentes opacos de la envolvente – techos, muros y pisos-, la pérdida de la energía se distribuye de la siguiente manera: por el techo se pierde el 40 % del calor o frío; los muros son los responsables del 30%; y el piso representa el 10%. Es importante tener en cuenta que es una superficie próxima al cuerpo, más aún para los chicos, que suelen jugar o tirarse. Aislar térmicamente el piso, lo convierte en una zona confortable.
“Mucho se viene hablando sobre el uso de aires acondicionados y cómo no superar los 400kw/h por mes. Pero lo que no se está considerando es revisar las condiciones edilicias y el nivel de aislación térmica eficiente que tienen las viviendas, no sólo para lograr que el inmueble no pierda energía, sino justamente para saber qué electrodomésticos para climatización elegir e instalar, qué cantidad y cómo usarlos, ya que la decisión de instalación se define en función a la aislación térmica que tenga el hogar”, agrega García Zúñiga.
Hay que tener en cuenta que los sistemas de calefacción, como los aires acondicionados, por si solos no resuelven el problema, es necesario una solución integral. Una vez analizada la situación de la construcción y realizadas las mejoras, es cuando se recomienda elegir un sistema de climatización para la vivienda. Una de las soluciones más efectivas es la aislación térmica eficiente que se puede aplicar tanto en construcciones nuevas como en instancias de rehabilitación. Dentro de los materiales de aislación térmica eficiente, hay 3 que resultan los más efectivos y que brindan los mejores resultados: Lana de vidrio, Poliestireno expandido y Poliuretano. Con aislación térmica eficiente se logra ahorrar hasta un 35% en el consumo de energía de un hogar y hasta un 60% en las facturas sobre la luz y el gas consumidos para climatizar un hogar