Las redes sociales se han vuelto una importante herramienta para concretar ventas y, por ello, los inmobiliarios recurren a ellas por exposición y para generar negocios. No obstante, existen ciertas recomendaciones a seguir para alcanzar el éxito deseado.
Las redes sociales han sido grandes protagonistas en los últimos años, ya sea como medios de mensajería, fuentes de información y entretenimiento, entre otros. Pero, con cada día que pasa, estas herramientas sociales también se han convertido en un excelente aliado comercial debido a su moderna manera de crear y desarrollar relaciones con potenciales clientes. Y el sector inmobiliario no queda excluido de sus beneficios.
Dos casos de éxito en este ámbito son: por un lado, encontramos a Marcela Genta, inmobiliaria adherida a deinmobiliarios, la realtor número uno de TikTok Argentina. Ella tiene 182.300 seguidores en la plataforma y logra generar videos que consiguen más de 4 millones de vistas. Por otro lado, se encuentra Santiago Magnin, fundador de deinmobiliarios, el realtor número uno de YouTube. Él tiene el canal inmobiliario más consumido de YouTube con 1.800.000 impresiones y 279.100 visualizaciones de 5 minutos promedio por mes, una atención que deriva en negocios.
«Aproximadamente, uno de cada 1.000 consumidores del contenido se pone en contacto conmigo y, cada diez conversaciones, sale un pedido de tasación. Además, podemos observar que cada seis pedidos de tasación se capta una propiedad para poner en venta y, de dos captaciones puestas en venta, se vende una propiedad. En otras palabras, de cada 120.000 visualizaciones en YouTube sale una venta», comenta Magnin.
En consecuencia, las redes sociales resultan útiles instrumentos para el mercado inmobiliario. Por supuesto, representan una oportunidad para potenciar un negocio siempre que la comunicación a través de estos canales se realice correctamente.
Recomendaciones para vender a través de redes sociales
Según su experiencia vendiendo a través de redes, Magnin aconseja que «para empezar, hay que entender que ninguna plataforma es la ideal para todos. Hay que hacer un trabajo profundo de autoconocimiento para descubrir cuál es la mejor red social para cada uno. El hecho de que Instagram sea la red social más usada puede ser un dato engañoso. Por ejemplo, dicha plataforma también es la red social más usada por los inmobiliarios; por lo tanto, la relación oferta (contenido de inmobiliarios) y demanda (usuarios pasando tiempo en la app) no es tan ventajosa como en TikTok y Twitch, donde casi ningún inmobiliario produce contenido».
Luego, advierte que se debe ser cuidadoso con el material a compartir. Lo cierto es que se suelen escuchar muchas cosas con respecto a qué subir a redes y aquellas recomendaciones pueden ser contraproducentes. Concretamente, cuando se habla de calidad, tipos de contenido y el por qué del mismo.
En primer lugar, hay que tener en cuenta que la cantidad siempre le gana a la calidad dado que la calidad en redes es subjetiva. Se puede recurrir a expertos e invertir mucho dinero en la producción de un contenido y no tener repercusión, mientras que algo hecho de forma artesanal puede tener millones de vistas, cientos de miles de interacciones y generar decenas de negocios.
En segundo lugar, realizar un mix de tipos de mensaje para llegar a la estrategia ideal es un error. Todo el contenido tiene que agregar valor; no sirve hacer 80% del material relevante (educativo, entretenido o creativo) y 20% promocional. Cualquier posteo publicitario destruye el trabajo construido sobre el contenido de importancia. Si uno simplemente aporta valor, los negocios llegan solos.
En último lugar, se debe tener en claro la razón por la que se crea contenido y, sobre todo, cuáles son los embudos de conversión. Se suele creer que hay que alimentar el embudo de compradores, que hoy en día se puede sustentar con publicidad en portales consolidados. Sin embargo, lo que realmente debe alimentar un negocio inmobiliario es el embudo de propietarios vendedores debido a que de esa manera se pueden conseguir más tasaciones de calidad.
A fin de cuentas, la clave reside en generar contenido todo el tiempo. De ese modo, cada posteo bien logrado dará sus frutos. Si bien en el futuro nos encontraremos con nuevas o modificadas plataformas, lo que no cambiará es que quien genere más contenido de valor será el «dueño» de esas futuras redes sociales.
Como resume Santiago Magnin: «El éxito proviene de hacer mucha cantidad de contenido, siempre tratando de agregar valor (sin ser promocional o publicitario) en la plataforma ideal donde uno pueda encontrar su voz. Si uno tiene talento para sacarle una sonrisa a la gente en 30 segundos, su plataforma ideal es TikTok. Si uno tiene talento para explicar un concepto muy complejo de forma simple en 20 minutos, su plataforma ideal es YouTube. Si uno tiene un grupo de fanáticos hardcore que lo sigue a todos lados, su plataforma ideal es Twitch. Hay que entender a cada plataforma y entenderse a uno mismo. Lo más fácil es entender a las plataformas».