“Nuevas Escuelas” es un proyecto nacido en el Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires y desarrollado por el Ministerio de Desarrollo Urbano que propone un conjunto de centros de aprendizaje localizados en distintos puntos de la ciudad, todos compartiendo una misma identidad formal y funcional. Este proyecto instala una sistematización del diseño y su posible replicación en cualquier lote, y va acompañado de un Manual de Diseño Escolar adaptado a las necesidades del presente. Algo que no tuvo renovación en nuestro país desde los años 70.

La Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible, planteada en Septiembre 2015 por la Asamblea General de la ONU,  posiciona la Educación de Calidad como cuarto Objetivo de Desarrollo. En comparación, el objetivo relacionado a Ciudades es el número 11.

Y es que la educación es, según esta misma Asamblea: “un derecho humano fundamental y la base para garantizar la realización de otros derechos”.

El Ministerio de Educación de la Ciudad, con la Ministra Soledad Acuña y fomentado por Horacio Rodríguez Larreta como eje de su gestión, se alinea con este objetivo global primario —“Garantizar una educación inclusiva y equitativa de calidad y promover oportunidades de aprendizaje permanente para todos”—  y desarrolla nuevos planes y proyectos de arquitectura escolar pública. Los “Entornos de Aprendizaje Eficaces” (una de las tres “formas de ejecución” que la Agenda 2030 señala para lograr la concreción del mencionado objetivo) refieren a la construcción y adecuación de instalaciones escolares seguras, no violentas, inclusivas y eficaces.

Junto a los nuevos conceptos pedagógicos de flexibilidad, adaptación a los cambios tecnológicos y formación para el futuro, los nuevos proyectos de arquitectura escolar locales responden a objetivos de sostenibilidad adoptados globalmente.

Nuevas Escuelas es uno de los tres planes de trabajo que se erigen como ejes del área de Infraestructura del Ministerio de Educación. Los otros dos son Polo Mataderos y Polo Mugica.

 

Nuevas Escuelas
El plan de trabajo se inició con una investigación sobre la evolución de la arquitectura escolar en Buenos Aires, tomando el período desde 1882 hasta el presente; llevada a cabo por historiadores y especialistas de arquitectura, esta investigación fue la base teórica que permitió delinear nuevas necesidades y adaptaciones tanto para el partido arquitectónico de las nuevas escuelas como para la definición de nuevos espacios de transición con el espacio público.

Dos objetivos básicos surgieron de la investigación y del subsiguiente trabajo realizado por un equipo profesional multidisciplinario: uno, la necesidad de una identidad edilicia, un conjunto de escuelas que respondan a un mismo formato y proyecto de diseño posible de adaptarse; dos, la creación de un Manual de Trabajo para el diseño de futuras escuelas. Este Manual toma tres puntos que son a su vez las tres premisas que guiaron el proceso de diseño y lo definieron: Libertad de uso, Interacción urbana y Actualización técnica.

El primer objetivo se concreta con la planificación de catorce escuelas cuya localización responde a la demanda de vacantes en la ciudad; en este sentido, se identifica una demanda significativa en el área sur debido a su crecimiento y proceso de densificación de los últimos años.

Para las catorce escuelas el proceso de licitación comenzará en el primer trimestre de 2018, incluyendo las escuelas de nivel Inicial y Primaria de la Villa Olímpica.

En cuanto al proyecto, las tres premisas se materializan a través de diversos modos:
1.    La libertad en el uso lo hace con plantas bajas libres destinadas a usos flexibles, plantas tipo con diversidad de espacios para el aprendizaje y la incorporación de terrazas como patios recreativos, preservando la mayor parte del terreno como superficie verde absorbente.
2.    La interacción urbana es representada básicamente por un nuevo espacio que actúa como fuelle entre la escuela y la vereda: un área que contiene la situación de encuentro entre los alumnos y sus familias, en los momentos de llegada y retiro de la escuela, liberando el espacio público pasante.
3.    Los nuevos criterios constructivos simplifican el tendido y pase de instalaciones, que van suspendidas y ocultas bajo un cielorraso acústico continuo, con un sistema de columnas y losas sin vigas. La fachada incorpora pasarelas técnicas con malla metálica electrosoldada que actúan como parasoles y sistema de seguridad, permitiendo además la limpieza de los vidrios.

Estas fachadas son las que generan la imagen que identifica todas las nuevas escuelas, con planos semitransparentes que cubren los cuatro lados del edificio en terrenos de “Perímetro libre” y dos en los lotes “Entre medianeras”. De hecho, estas situaciones urbanas existentes representan dos de las tres tipologías en que se diferencian las catorce escuelas, siendo la tercera “Terrenos Atípicos”.

Con organizaciones espaciales que en el interior eliminan el tradicional pasillo y agrupan aulas en torno a espacios amplios y flexibles, con alturas totales de 4 metros que proponen los cerramientos como superficies comunitarias de exposición e interacción lúdica y garantizan a su vez la continuidad visual interior-exterior, y con servicios que responden a la necesidad de accesibilidad para todos, el proyecto de arquitectura brinda una respuesta clara y consistente para los espacios de aprendizaje que exige la educación del futuro.

Fuente: Ministerio de Educación y Ministerio de Desarrollo Urbano