Latinoamérica: De acuerdo con la edición 2016 del Climatescope

El país trasandino superó a Brasil a nivel regional y se ubicó en el segundo lugar entre las economías emergentes de todo el planeta, sólo por debajo de China. La Argentina descendió hasta el 26⁰ puesto del ranking.

Chile es la economía en desarrollo que más invierte en materia de energías renovables en Latinoamérica y la segunda que más lo hace en el mundo. Así lo indica la última edición del Climatescope, ranking anual elaborado por Bloomberg New Energy Finance (BNEF) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con el respaldo de los gobiernos de Estados Unidos y el Reino Unido.
Según el índice, que compara la competitividad en el rubro de unas 58 naciones emergentes, siete mercados –los de China, India, Egipto, Pakistán, Brasil, México y Sudáfrica– generan un 18% más de fuentes energéticas renovables que las grandes potencias. Asimismo, cuatro de cada cinco economías en desarrollo ya han fijado metas nacionales vinculadas con el apoyo a la generación limpia.
El listado de 2016 fue encabezado por China, con un puntaje de 2,53 unidades. Le siguieron Chile (con 2,36) y Brasil (con 2,29). Dentro del top-10 se ubicaron, además, Uru-
guay (2,29), Sudáfrica (2,21), India (2,17), Uganda (2,05), Honduras (2,03), México (2,02) y Kenia (2,01).
Luego se posicionaron Jordania (con un score de 1,87), Pakistán (1,87), Ruanda (1,73), Indonesia (1,69), Panamá (1,62), Perú (1,60), Vietnam (1,56), Nepal (1,54), Tanzania (1,53) y Costa Rica (1,51), en ese orden.
Para encontrar a la Argentina, que en esta oportunidad cosechó 1,39 puntos, hay que retroceder hasta el 26⁰ lugar. Por ende, además de las naciones mencionadas quedó por debajo de Guatemala (1,49), Colombia (1,45), Nicaragua (1,44), Jamaica (1,41) y Bangladesh (1,40).
Debe destacarse que el país perdió seis ubicaciones en relación con la edición de 2015 (cuando sumó la misma cantidad de unidades, pero se colocó en el 20⁰ escalón) y nueve con respecto a 2014 (cuando obtuvo 1,24 puntos, pero llegó al 17⁰ lugar). No obstante, esta deficiente performance seguramente se verá revertida en 2017, cuando entren en consideración los avances registrados gracias al éxito de las rondas licitatorias 1 y 1.5 del Plan RenovAr.
Entre las naciones peor calificadas en el Clima-tescope figuran Haití (que recibió un puntaje de 0,78), Bahamas (0,75), República Democrática del Congo (0,74), Costa de Marfil (0,71), Tayikistán (0,67), Guyana (0,67), Trinidad & Tobago (0,63), Paraguay (0,62), Venezuela (0,56) y Surinam (0,55), las cuales ocuparon los últimos 10 puestos.

La Argentina perdió seis ubicaciones en relación con 2015 (cuando se colocó en el 20⁰ escalón) y nueve con respecto a 2014 (cuando llegó al 17⁰ lugar). Esta tendencia se verá revertida en 2017, cuando entren en consideración los avances del Plan RenovAr.

 

Satisfacción chilena

El anuncio de los resultados del ranking de Bloomberg y el BID no pasó desapercibido en Chile. Incluso la presidenta Michelle Bachelet se refirió públicamente a la ubicación de privilegio obtenida.
“Hemos hecho una inversión de u$s 3.200 millones durante el año pasado en el campo de las fuentes energéticas renovables, con énfasis en la energía solar. Estamos a la vanguardia regional en instalaciones solares fotovoltaicas y también somos líderes en otras vías de generación renovable no convencional”, resaltó la mandataria durante la reciente presentación del auto solar “Eolian Fénix”, evento que se celebró en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile.
El cambio de la matriz energética chilena, apuntó, dejó de ser una promesa para convertirse por estos días en una innegable realidad. “Hace tres años prometimos que íbamos a cambiar la participación de las distintas fuentes de energía en nuestra matriz, y hoy digo con orgullo que –tal como lo demuestra el Climatescope 2016– hemos avanzado significativamente en materia de producción limpia y sustentable”, recalcó.
Según sus palabras, es momento de celebrar que Chile avanza hacia un pleno desarrollo, pero que lo hace con total conciencia de los desafíos planetarios, de manera creativa, responsable y sostenible. “Estamos cumpliendo con lo que nos comprometimos a hacer. Aunque no lo estamos realizando de cualquier manera: venimos promoviendo un desarrollo limpio y sustentable para contribuir en la lucha contra el cambio climático, pero también posibilitamos el acceso a energía barata en beneficio de toda nuestra comunidad”, completó la jefa de Estado.

Atractivo emergente

El Climatescope nació en 2012 a partir del esfuerzo mancomunado de BNEF y el BID. Inicialmente su evaluación de atractivo para la generación de energías verdes se limitaba a unos 26 países de Latinoamérica y el Caribe.
En 2014, el ranking se expandió para incluir a 19 economías de Asia y otras 10 de Asia, además de 15 provincias de China y 10 estados de India.
El año pasado, en tanto, el listado volvió a ampliarse, al añadir en la consideración a naciones como Egipto, Jordania y Marruecos. Actualmente son 58 las economías emergentes tomadas en cuenta.
Buena parte de los datos relevados (relacionados esencialmente con las emisiones de dióxido de carbono y la instalación de proyectos solares, eólicos, geotérmicos y de biomasa, entre otros ítems) fueron aportados por los gobiernos de Estados Unidos y el Reino Unido.

Fuente: Revista Petroquímica, Petróleo, Gas, Química & Energía